El 89% de las grandes empresas a nivel mundial tienen en marcha una transformación digital y de IA, pero solo 3 de cada 10 empresas logran el aumento de ingresos esperado.

El estudio de McKinsey & Company llamado “El lado humano de la IA generativa: creación de un camino hacia la productividad», afirma que la inteligencia artificial (IA) generativa puede aumentar de forma considerable la productividad individual y laboral, siempre y cuando las empresas que implementan estas tecnologías lo hagan dando prioridad al lado humano y creando puestos de trabajo donde sus habilidades se puedan complementar con la IA generativa.

Esta investigación desarrollada por la firma global explica que el 89% de las grandes empresas a escala mundial tienen en marcha una transformación digital, pero que solo el 31% de ellas logra los resultados esperados, como por ejemplo aumentar los ingresos y reducir costos.

McKinsey señala que hay algunos factores fundamentales por los cuales las empresas no logran potenciar las virtudes de la IA generativa en sus entornos. En primer lugar, muchos líderes limitan el uso de esta inteligencia a puestos técnicos, como científicos de datos o ingenieros, pero realmente la IA puede colaborar también en tareas diarias de otro tipo de puestos. Por otro lado, las empresas no están cuidando su talento interno y hay una alta rotación en los puestos de creadores de IA, de hecho, un 51% de los encuestados que se identificaron como creadores, aseguraron que planean dejar su trabajo en tres o máximo seis meses, porque sienten que no tienen flexibilidad en sus trabajos ni incentivos para quedarse.

Por último, las habilidades cognitivas y socioemocionales se han vuelto más difíciles de encontrar con tanto desarrollo de la IA, por lo que ahora son bastante apetecidas y requeridas en estos puestos de creación.

Como parte de las recomendaciones que hace McKinsey, en definitiva, se pueden replantear algunos puestos de trabajo, donde se pueda hacer una definición de cuáles tareas puede realizar la persona y en cuáles se puede apoyar en la IA.  Además, se puede buscar un enfoque diferente al tradicional en cuanto a cumplimiento de metas, es decir, dejar de pensar en una jornada laboral de horas determinadas y centrarse en una jornada en la que la meta sea cumplir los objetivos, no acumular una cantidad específica de horas.

Por último es importante escuchar a los colaboradores, si no se atienden las inquietudes o malestares de ellos, la fuga de talentos será constante y no se podrá generar una sinergia con el uso de las tecnologías.

«La generación de IA tiene el potencial de transformar el lugar de trabajo, pero es importante recordar que la tecnología por sí sola no es suficiente. Para aprovechar plenamente los beneficios de la IA generativa, las organizaciones pueden priorizar el lado humano de la ecuación y crear empleos que sean satisfactorios, colaborativos y productivos», afirmó Stefano Martinotti, socio de McKinsey & Company.

Fuente:vidayexito.net