La Fed ahora ha abandonado su objetivo de aterrizaje suave y, en cambio, apunta a una «recesión de crecimiento» con la tasas altas.
Las acciones de EE.UU. temblaron el último día de agosto en el que todo, desde las acciones hasta los bonos del Tesoro y las materias primas, retrocedió a medida que los bancos centrales de todo el mundo intensificaron sus luchas contra la inflación.
El S&P 500 y el Nasdaq 100 fluctuaron entre modestas ganancias y pérdidas. Los bonos del Tesoro cambiaron poco después de reducir las caídas que fueron lideradas por una venta masiva de bonos del Reino Unido y de la zona euro.
Los inversionistas han estado revisando datos económicos a veces contradictorios. Los datos de vacantes laborales del martes subrayaron la estrechez en el mercado laboral, pero los datos renovados de ADP del miércoles mostraron que las empresas estadounidenses aumentaron el número de empleados a un ritmo relativamente lento en agosto. Con los funcionarios de la Reserva Federal decididos a actuar para controlar la inflación, todos los ojos estarán puestos en el informe de trabajo del viernes en busca de más pistas sobre políticas.
“Lo que está claro es que la predicción de este mercado no es clara”, dijo Angeline Newman, directora gerente de UBS Global Wealth Management, en Bloomberg Television. “Vivimos en un mundo donde las señales económicas contradictorias hacen que el camino de la política monetaria sea muy difícil de determinar”.
La Fed ahora ha abandonado su objetivo de aterrizaje suave y, en cambio, apunta a una «recesión de crecimiento», lo que significaría un período prolongado de escaso crecimiento y aumento del desempleo.
Además, el petróleo se dirige a una tercera caída mensual, la racha de pérdidas más larga en más de dos años, obstaculizada por la probabilidad de un crecimiento global más lento.
Mientras tanto, la inflación de la zona del euro se aceleró a otro máximo histórico, fortaleciendo el caso para que el Banco Central Europeo (BCE) considere un aumento enorme de las tasas de interés cuando se reúna la próxima semana.
El miembro del Consejo de Gobierno del BCE, Joachim Nagel, instó a una reacción «fuerte». Los mercados monetarios ahora han descontado 125 puntos básicos de ajuste del BCE para octubre, lo que implica un aumento de medio punto y un aumento de tres cuartos de punto distribuidos en sus próximas dos decisiones de política.
Los inversores también se enfrentan a la creciente fricción entre Beijing y Taipei después de que los soldados taiwaneses dispararan para protegerse de los drones civiles y evaluaran los últimos datos chinos, que indicaban que la actividad de la fábrica se contrajo por segundo mes. La escasez de energía, una crisis del sector inmobiliario y los brotes de covid pasaron factura.
Fuente: larepublica.co
