Desde plataformas como YSI y Kelisto avisan que el periodo de permanencia de 24 meses se puede alargar ‘de facto’, si se adquiere un dispositivo a plazos o se accede algún tipo de oferta o promoción.

Las principales telecos tiene pocos días, hasta final de mes, para informar a sus clientes de los cambios que introduce la nueva Ley General de Telecomunicaciones publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el pasado 28 de junio y que trae, como principal novedad para nuestros contratos, la fijación de la permanencia en un máximo de 24 meses (dos años). Además de reforzar aspectos como las obligaciones de información, la gratuidad de las portabilidades (cambios de operadora) y derechos del usuario como el de recibir un resumen de fácil lectura del contrato. ABC ha podido confirmar por varias fuentes que los clientes de las principales telecos en España (Telefónica, Orange, Vodafone, Másmovil) ya están siendo avisados de estos cambios.

Sobre la permanencia, tanto desde el recomendador YSI como desde el comparador Kelisto y la OCU ven muy positivo el cambio teniendo en cuenta la competencia y el nivel de ofertas de bajo coste existentes. «Se acaban los contratos indefinidos, que eran más beneficiosos para las compañías que para los consumidores. Ahora hay un límite máximo de 24 meses, que luego se puede prorrogar», apuntan desde esta última organización que también muestran su desacuerdo con que el plazo de preaviso ante cambios en la tarifa sea de apenas un mes. Además muestran su escepticismo sobre otras novedades de la nueva Ley como la obligación de aportar al usuario un resumen comprensible de su contrato.

Ahora bien, el límite de los contratos a 24 meses ya está forzando a las compañías que mantienen este tipo de permanencias a renovar contratos una vez se cumple el plazo. Desde YSI, el responsable de investigación operativa Álvaro García, ha admitido que «hubiera sido preferible 12 meses y que este cambio responde a lo que hacían las operadoras hace un par de años«.

La adquisición de terminales y la permanencia

En este sentido, ha apuntado, hacia algunas prácticas como la inclusión de terminales dentro de lo ofertado por la operadora y que, a la postre, pueden suponer una mayor permanencia en la compañía al tratarse de un contrato de compra a plazos. «Si tú compras un terminal en 36 o 48 cuotas mensuales, pese a que tu permanencia máxima sea de 24 meses, si te das de baja antes tendrás que abonar lo que te quede por pagar del dispositivo o devolverlo según las condiciones que establezca tu contrato«, recuerda la portavoz de Comunicaciones de Kelisto, Sara Perales. Algo similar, ha añadido, sucede cuando se ‘regala’ el acceso a una plataforma de streaming y que se pierde si nos damos de baja.

García, de YSI, cree que en ocasiones cambiar de compañía puede salir a cuenta a pesar de los posibles «costes de cancelación» y, a la postre, suponer un «ahorro suficiente» para el consumidor con el cambio. En cualquier caso, ha recomendado huir de las denominadas ‘ permanencias inversas’ ya no tan presentes en el mercado español. «Te atan totalmente, van de menos a más y las cancelaciones suponen un pequeño coste que luego va aumentando», ha concluido.

Consejos si quiero cambiar de tarifa

En cualquier caso, Perales (Kelisto) ha aconsejado que el consumidor que esté pensando en cambiar de tarifa tenga en cuenta dos detalles: Los descuentos no siempre duran lo mismo que la permanencia y se puede acabar pagando «una cuota muy elevada antes de poder irnos». Y, sobre todo, si hay subidas de precios o cambios «que afecten negativamente a los usuarios, estos podrán darse de baja sin penalizaciones, aunque no haya finalizado la permanencia».

Objetivo: tener contento al cliente

En cualquier caso, el responsable de investigación operativa de YSI, ha recordado que las operadores siempre quieren tener contento al cliente y que «el operador siempre te da facilidades, motivos para retenerte y que a lo mejor en los últimos 6 meses de la permanencia te pueden ofrecer un cambio dentro del mismo bloque o compañía«. En estos casos, ha añdido siempre conviene estudiarlo.

Fuente: abc.es

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